Monday, December 11, 2006

Volver


Por: Fernando Muñoz

Y un viaje de vuelta, es siempre un viaje de ida
nos vamos yendo a los recuerdos
y a los aromas del pasado
vamos tratando de construir dejavús
en cada esquina...

Nos paseamos por las mismas calles.
Son las mismas, ¿cierto?

Uno que otro edificio nuevo nos mira como bichos raros,
una que otra carretera nueva se avalanza sobre nosotros,
nos recuerda que la ciudad tiene un ritmo...
no olvidemos ese frenesí de metrópoli bullante
y enloquecedora, ensordecedora, enseguecedoramente multitudinaria.

Y de a poco vamos reencontrandonos
con nuestros viejos vicios
con los senderos olvidados
con esa rutina perdida en el fondo de aquel cajón
con ese ritual de pasos construidos en un recorrer rutinario.

Hasta que vamos viendo las mismos rostros.
las mismas cosas que antes nos hacían soñar,
y nuestra voz cambia, tratamos de hablar como antes
solíamos decirnos tantas cosas.

Los árboles siguen ahí
las montañas siguen ahí
las manos arrugadas de tu padre
y la sonrisa espontánea de mamá
el olor de la comida recién preparada
el sonido de esas conversaciones casi olvidadas e inacabadas.

y ya cuando te toca volver...
te das cuenta de que no estás volviendo a ninguna parte..
te das cuenta que te estás yendo
La próxima vez que estés de visita
sabrás...
que no es la ciudad la que cambia
el que cambia eres tú.

1 comment:

Anonymous said...

Amigo:
Así ke el viaje te ha llevado a la casa antigua. Ahí encontrarás los nuevos y viejos fantasmas, pero, a partir de ahora, todos fantasmas buenos.

Un abrazo y saludos a la familia

Mogura